La Ley de lenguas. Su obtención, sus implicancias|Ñe’ẽnguéra rehegua Léi. Mba’éichapa ojehupyty, mba’épa he’ise

11-05-2011

[lang_es-es]Durante todo el año 2010, la Dirección de Promoción de las Lenguas (dependiente de la Dirección General de Promoción Cultural Comunitaria) estuvo abocada en una intensa campaña a fin de lograr la promulgación de la largamente soñada Ley de Lenguas, lo que se logró en diciembre de ese año, luego de continuas gestiones y actividades interinstitucionales.[/lang_es-es]

[lang_gu]2010 ary pukukue aja niko, Ñe’ẽnguéra ñemoherakuã Oisãmbyhypáva (kóva oje’ykeko Dirección General de Promoción Cultural Comunitaria rehe) omba’apo kangue oñemboaje hagua Ñe’ẽnguéra Léi, upéva ojehupyty pe jasypakõi ohasava’ekuépe, heta asyete omba’apo rire opáichagua atyguasu ñane retãygua.[/lang_gu]

Este importantísimo logro se dio en los siguientes pasos:

Campaña por la Promulgación de la Ley de Lenguas, junto con la Comisión Nacional de Bilingüismo, el Ministerio de Educación, el Ateneo de Lengua y Cultura Guaraní, la Fundación Yvy Marane’y y el Taller de la Sociedad Civil.

5.000 adhesiones con firmas en el marco de la Campaña de Promulgación de la Ley de Lenguas de la sociedad civil paraguaya y de figuras de prestigio internacional, como académicos e investigadores de universidades de Francia, Alemania, España, Estados Unidos, y América Latina, además de numerosos escritores de nombradía del continente.

Aprobación de la Ley de Lengua por las cámaras de Senadores y Diputados del Congreso Nacional.

Sanción de la Ley de Lenguas por el Poder Ejecutivo.

Culminando un proceso de trabajo de varios lustros, en los últimos días de diciembre de 2010, el Poder Ejecutivo sancionó la Ley de Lenguas que en los meses anteriores había obtenido la aprobación de las dos cámaras del Congreso Nacional. La SNC, desde su Dirección de Promoción de las Lenguas, creado en agosto de 2008, apoyó decididamente las gestiones desarrolladas por diversas instituciones nacionales, dirigidas a la obtención de esta ley, lo que concitó la atención de la comunidad cultural en los últimos años.

La sanción de la Ley de Lenguas significó la culminación de un proceso iniciado hace más de 15 años por instituciones y personas preocupadas por la situación lingüística paraguaya. En el curso de estos años se presentaron varios anteproyectos, los últimos de los cuales confluyeron en el texto presentado por el Poder Ejecutivo en 2007. Dicho texto se basó en los anteproyectos elaborados por la Comisión Nacional de Bilingüismo y el Taller de la Sociedad Civil, los cuales fueron comparados y unificados en una versión consensuada. El texto fue resultado de numerosas consultas realizadas con todos los sectores sociales, dos Audiencias Públicas y numerosos debates realizados a lo largo y ancho del país.

Teniendo en cuenta las dilaciones que ya había soportado el anteproyecto, a comienzos del 2010, la Dirección de Promoción de las Lenguas propuso lanzar una Campaña por la Promulgación de la Ley de Lenguas, la que se hizo realidad uniendo los esfuerzos de  la Secretaría Nacional de Cultura, la Comisión Nacional de Bilingüismo, el Ministerio de Educación, el Ateneo de Lengua y Cultura Guaraní, la Fundación Yvy Marane’y y el Taller de la Sociedad Civil, bajo el lema “Taipytuhë ha taimbarete ñane ñe’ënguéra”.

La Campaña logró una gran adhesión de la ciudadanía y de importantes intelectuales del exterior en una colecta que logró reunir varios miles de nombres. Asimismo obtuvo el apoyo de instituciones y organizaciones tan importantes como la Corte Suprema de Justicia, la Conferencia Episcopal Paraguaya, la Asociación Indigenista del Paraguay, el Centro de Estudios Antropológicos de la Universidad Católica, el Foro Permanente de Cultura y la Confederación Nacional de Trabajadores Campesinos, así como  dictámenes favorables de la Secretaría Nacional de Cultura y el Ministerio de Educación.

 

OBJETIVOS DE LA LEY

La Ley de Lenguas se ha gestado con el propósito de responder en primer lugar, a un mandato que data de 1992, expresado en el artículo 140 de la Constitución Nacional: “El Paraguay es un país pluricultural y bilingüe. Son idiomas oficiales el castellano y el guaraní. La ley establecerá las modalidades de utilización de uno y otro. Las lenguas indígenas, así como las de otras minorías, forman parte del patrimonio cultural de la Nación”. La necesaria reglamentación fue postergada durante todos estos años, teniendo como resultado la no oficialidad del guaraní, así como la defensa efectiva de las lenguas indígenas no habían pasado de un reconocimiento simbólico.

En segundo lugar, la Ley de Lenguas permitirá la creación de la Secretaría Nacional de Políticas Lingüísticas, que comprenderá tres Direcciones: la Dirección General de Planificación Lingüística, la de Investigación Lingüística y la de Documentación y Promoción de las Lenguas Indígenas. Asimismo, plantea la creación de la Academia de la Lengua Guaraní, que tendrá a su cargo la normativización de la lengua, estableciendo el alfabeto y la gramática oficial, además de diversos mecanismos para la normalización de la lengua en todas las instancias de la vida social. Este abanico de herramientas responde al objetivo de desterrar las discriminaciones lingüísticas y abrir camino para la dignificación de todas las lenguas del Paraguay.

El texto del Anteproyecto abarca los siguientes capítulos: De los Derechos Lingüísticos; Del uso de Las Lenguas en el Ámbito Público; De los Idiomas en la Educación; De la estructura organizativa para la aplicación de las Políticas Lingüísticas de la Nación; De los Organismos; De la academia de la Lengua Guaraní; y Disposiciones Finales.

La Ley de Lenguas se ha conquistado coincidiendo con la significativa conmemoración del Bicentenario de la Independencia Nacional, erigiéndose en una de las reivindicaciones culturales más importantes de los últimos años, que instaura el cimiento legal para la dignificación de las lenguas del Paraguay.