Obras de Tchaikovsky y Beethoven en 3° Concierto de Temporada de la OSN

18-05-2012

 

El próximo viernes 25 de mayo, a las 20 horas, se realizará el 3er. Concierto de Temporada de la Orquesta Sinfónica Nacional, la Sinfónica de la gente, en el Hotel Guaraní Esplendor (Oliva esq. Independencia Nacional).


 

En la ocasión, se contará con el maestro brasilero Leonardo David como director invitado. David es un reconocido músico de gran trayectoria profesional, su presencia en Paraguay es posible gracias al valioso apoyo de la Embajada del Brasil en Paraguay.

 

En la gala musical, “la sinfónica de la gente” interpretará  la Sinfonía No. 5 de Ludwig Van Beethoven y la Sinfonía No. 4 de Piotr Ilyich Tchaikovsky, ambas piezas magistrales del repertorio clásico universal.

 

La Orquesta Sinfónica Nacional cuenta con la Dirección Titular del Maestro Juan Carlos Dos Santos; es dependiente de la Secretaría Nacional de Cultura, institución que apoya sus actividades junto con otras entidades amigas como: el Hotel Guaraní Esplendor, Banco Central del Paraguay, Municipalidad de Asunción, la Embajada del Brasil en Paraguay, Asunción Vanpack, Ateneo Paraguayo, Unión Libanesa, Show Time, entre otras.

 

El Maestro Leonardo David (Brasil) inició sus estudios musicales a los 7 años. A la edad de 11 años se integró como estudiante a un proyecto musical del SESI- ES (Servicio Social de la Industria, en Espíritu Santo, Brasil). Así estudió violín con el profesor Carlos Roberto Berto. También fue alumno de los profesores: Carmelita Reis (RJ), y Edson Queiroz de Andrade (MG). Culminó sus estudios superiores con énfasis en violín en la Facultad de Música de Espíritu Santo (Brasil); siendo Hariton Nathanailidis uno de sus principales maestros. Enseñó violín en la misma facultad donde egresó, desde el 2001 hasta el 2008. Estudió Dirección Orquestal con los profesores Modesto Flávio e Helder Trefzger. Desde setiembre de 2008 toma cursos de perfeccionamiento con el renombrado Maestro Isaac Karabtchevsky, en Olinda-PE y Riva del Garda- Italia. Fue fundador y Director de la Orquestra Juvenil de la Facultad de Música de Espíritu Santo, con la que realizó diversas presentaciones por la región sudeste del Brasil. Es Maestro y Director artístico de la Orquestra de Cámara y del Coro del SESI-ES. Dirigió las siguientes orquestas: Orquesta Sinfónica de Recife, Orquesta Sinfónica Nacional del Paraguay (OSN), Orquesta Sinfónica de Porto Alegre, Orquesta Juvenil de Salzburgo, Orquesta de Cámara del Instituto Preservate, entre otras.

 

El maestro brasilero Leando David, maestro invitado de la OSN.

 

 

Sobre las Obras que ejecutará la OSN

Sinfonía N°. 5, Opus 67, del “Destino”,   de Ludwig Van Beethoven (1770- 1827)
La Sinfonía N.º 5, en do menor, Opus 67, del compositor alemán Ludwig van Beethoven, fue compuesta entre 1804 y 1808. También llamada la “Sinfonía del Destino”; es una de las composiciones más populares y conocidas de la música clásica y una de las sinfonías más interpretadas. Cuando Beethoven compuso su 5ta. Sinfonía ya estaba llegando a los 40 años y, a pesar de su sordera, había entrado en un imparable proceso de “furia creativa”. La obra consta de 4 movimientos: empieza con un Allegro de sonata, con el distintivo motivo de cuatro notas “corto-corto-corto-largo” (ta-ta-ta-taa). A este motivo inicial a veces se le ha acreditado el significado simbólico de la representación de “el Destino que toca a la puerta”, de lo cual no hay constancia concreta alguna. Luego, continúa con un andante y finaliza con un scherzo ininterrumpido, que comprende las dos últimas partes. Todos estos movimientos están basados integralmente en el motivo de cuatro notas señalado precedentemente. La obra fue estrenada en Viena el 22 de diciembre de 1808 en un monumental concierto de cuatro horas con estrenos exclusivos de Beethoven, y con una orquesta dirigida por el propio autor.

 

Sinfonía Nº 4, en Fa menor, Op. 36  Piotr Ilyich Tchaikovsky (1840-1893)
Esta obra data de 1877, un año muy difícil en la vida del compositor ruso Piotr Ilyich Tchaikovsky, marcado por  su malograda boda y su intento de suicidio. Sin embargo; también es la época del, comienzo de la amistad (exclusivamente epistolar) con su mecenas Nadezha Von Meck, su amiga y protectora durante 14 años, a quien dedicó esta sinfonía. La “Sinfonía Nº 4, en Fa menor, Op. 36”, inestable, de violentos contrastes, de instrumentación tímbrica imaginativa y hábil armonía cromática que la reviste de modernidad. El equilibrio entre la estructura sinfónica y su peculiar estilo personal, con ritmos de ballet, revelan al tardío romántico, tímido y a la vez profundo que fue Tchaikovsky. El primer movimiento, complejo e innovador, es tan largo como los otros tres juntos, creando una larga sombra en atmósfera y temas. Aunque la base conceptual sea la 5ª sinfonía de Beethoven, su desconcertante riqueza de ideas, tonalidades, desarrollos e interrelaciones, se integran en un novel esquema sonata. El segundo movimiento tiene una larga melodía, dibujada por el oboe, con inconstantes corcheas y libre articulación. Melancolía y nostalgia van de la mano en la utilización vocal, casi operística, de las maderas. En el tercer movimiento hay tres claras ideas sin relación entre sí: a) El vertiginoso y juguetón pizzicato sin precedentes en longitud (97 notas), pasando el tema de un grupo a otro, como un diálogo divertido, frívolo e incitante; b) Un trío para vientos sobre un tema popular, con un solo de flauta piccolo que requiere de un altísimo nivel técnico (21 notas en tres segundos); y c) Recrea una parada militar acompasada por los metales. El cuarto movimiento está basado en canciones populares rusas; el sinfonismo folklórico de Tchaikovsky alcanza aquí su clímax. La percusión pasa al primer plano en la coda, que dramatiza con una extrovertida conclusión triunfal.