Continúa hoy en Ciudad del Este el ciclo de cine taiwanés, que ya recorriera otras localidades del país. El ciclo es organizado por la Secretaría Nacional de Cultura y la Embajada de China (Taiwán), y se realiza a fin de promover los lazos interculturales y el conocimiento de otros conceptos estéticos audiovisuales.
La proyección se realizará a las 19:00 horas en el Salón Auditorio del Rectorado de la Universidad Nacional del Este; ocasión en la que se realizará el acto de lanzamiento correspondiente, que contará con la presencia de autoridades de la Secretaría Nacional de Cultura, la Embajada de China (Taiwán) y la Universidad Nacional del Este.
La muestra de cine contemporáneo de China-Taiwán se realizará todo este mes de octubre en Ciudad del Este, con el apoyo de la Universidad Nacional del Este. En el presente ciclo, serán proyectadas diferentes películas para todo público, todas subtituladas en español.
En la fecha de hoy será exhibida la película Orz Boyz, realizada en Taiwán en el año 2009, con una duración de 103 minutos, bajo la dirección de Gilles Yang Ya-Che. Los intérpretes son: Pang Chin-Yu, Lee Kuan-Yi, Mei Fang, Ma Chih-Hsiang, Hsu Chi-Wen.
El argumento de la película consiste en la historia de dos niños que son acusados por sus maestros de mentir cuando descubren la existencia de extraterrestres fantasmas que habitan en los cimientos de su escuela. Esta situación es apenas el comienzo de una historia sorprendente que trata sobre el pasaje de la niñez a la pre-adolescencia, con cambios de registro que alimentan el goce de lo imprevisible, sin dejar que se separen nunca el plano imaginario (extraterrestres, escenas de animación, espacios virtuales) del realista (la crueldad entre chicos, la vida cotidiana de familias disfuncionales), convirtiendo a Orz Boys en una película de gran singularidad temática. Lejos de toda pedagogía, esta ópera prima taiwanesa de Yang Ya-che parece haber comprendido que la tradición del cuento infantil ya fue incorporada por el espectador y se puede jugar con ella, reinventándola, haciendo que cada cual escape de su realidad, sabiendo que vale la pena el viaje aunque el regreso no sea tan maravilloso. La propuesta nos plantea a la imaginación como aventura real en una historia infantil que los adultos no dejarán de apreciar.
