[lang_es-es]Este miércoles 8 de junio a las 20:00 hs, en la Biblioteca Nacional, se habilitará la muestra “Cincelados entre el cielo y la tierra”, un conjunto de veintiséis esculturas de piedra arenisca representativas de las Misiones Jesuíticas Guaraníes de Trinidad.[/lang_es-es]
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La Secretaría Nacional de Cultura y la Secretaría Nacional de Turismo, en una acción conjunta, presentan “Cincelados entre el cielo y la tierra”, en el marco de la conmemoración del Bicentenario de la Independencia y la IV Reunión de la Comisión de Patrimonio Cultural del MERCOSUR -realizada la semana pasada en nuestra ciudad capital- con la intención de aproximar a la ciudadanía a un componente de profundo significación de nuestro Patrimonio Mundial, declarado Patrimonio Universal de la Humanidad por la UNESCO.
La muestra, cuya curaduría está a cargo de Carlos Colombino, integra veintiséis esculturas de piedra arenisca representativas de las Misiones Jesuíticas Guaraníes de Trinidad, y estará abierta al público en general en la sede de la Biblioteca Nacional.
Las rosadas rocas perseverantes encerradas en sus formas obstinadas, bajo el sol de los tiempos y los abandonados propósitos de la historia, nos responden desde su elocuente silencio de un universo construido en la línea del cielo y la tierra, de aquella inmensa frontera de verde y tierra roja desafiando la utopía.
Los fragmentos de profusos querubines de un paraíso lejano y las generosas flores, frutas y zarcillos entrelazados de esta tierra, prosiguen su diálogo en la presente muestra e invita al espectador a participar de ella, a compartir sus anhelos imposibles y sus instantes posibles.
La inauguración oficial de esta muestra será el día miércoles 8 de junio a las 20:00hs. Dará apertura al acto las palabras de los Ministros de Cultura y de Turismo, además de contar con la presencia de los Directores Generales e invitados especiales.
La Misión Jesuítica Guaraní Santísima Trinidad del Paraná fue fundada en 1706, al este del Uruguay. Posteriormente, en el año 1712 se trasladó a su sitio actual en donde fueron halladas las piezas de la muestra. Esta Misión se destaca por constituirse en el conjunto urbano más completo de los 30 pueblos, sus remanentes permiten comprender a cabalidad lo que era la estructura urbana de una misión jesuítica guaraní. Según las investigaciones realizadas, los fragmentos de las piezas líticas que se exponen fueron realizados para complementar el templo mayor que ostenta una abundante decoración interior, con frisos y otros elementos donde se refuerza la profusión de las formas, las luces y las sombras, concepciones típicas del estilo barroco, en este caso, adaptado al territorio, la fauna y la flora local.
Las piezas, en su totalidad, fueron talladas en piedra Itaki (piedra blanda) o arenisca, extraída de la cantera vecina (actual Ita Cajón). En algunas aún puede visualizarse la policromía utilizada, lo que potencia aún más la belleza en estas singulares obras que forman parte del conjunto. Fue declarada por la UNESCO como Patrimonio Histórico de la Humanidad en el año 1993.
